Y lo que quiero contaros es... pues... poco.
Seguimos metidos en Guadalix; pasando más frío que algo que pase mucho frío, y disfrutando de los entresijos de un reality en todo su esplendor. Aunque no tengamos el share de otros años (estaremos alrededor de un 18% ó 19%), más de uno y más de dos con los que hablo ha visto este año imágenes del programa; y mas de tres y más de cuatro se sabe al menos un nombre de los concursantes. Así que la típica frasecita de yo veo La2... dejémosla a un lado, que el zapping te hace ver de todo. No lo niegues.
Y voy a ir, quizás, a lo más interesante que pueda describir en esta entrada: un descubrimiento que he podido hacer hace unos días. Quizás algunos ya lo sabíais, pero siempre peco de humildad, y yo no!! Lo reconozco, no lo sabía. Alex de la Iglesia y Nacho Vigalondo, han trabajado en Zeppelin (productora a la que pertenezco). Maybe no caigáis en la cuenta. Pero para mí eso supone que todavía aspiro a ser nominado a los Oscar, o incluso a llegar a ser el presidente de la Academia. Pequeña reflexión que tuve. Pequeña reflexión que comparto.
Por cierto, en estos días he visto Biutiful (infumable) y Balada triste de trompeta (bastante aceptable si te dejas meter en el mundo tragicómico del antiguo realizador de las galas de Inocente, Inocente).
Seguimos en Twitter!!!!!